Convivencia parroquial en Navarra y País Vasco

Las familias, aunque vivan juntas, de vez en cuando necesitan irse fuera para compartir momentos, crear recuerdos, descansar, reírse, pero sobre todo ESTAR juntos.

Nuestra Parroquia pretende precisamente ser cada día un poco más eso, una gran familia, por eso de vez en cuando nos viene bien compartir unos días juntos y haciendo algo tan agradable y enriquecedor como visitar sitios culturalmente importantes, y que muchas veces tienen tanto que ver con nuestra fe.

Si el año pasado apostábamos por el sur para realizar este propósito, este año hemos apostado por el norte y nos hemos ido a Navarra y País Vasco. Dos días muy muy intensos, pero que han merecido mucho la pena.

El viernes llegábamos a Pamplona un poco tarde y cansados después de casi 6 horas en autobús, pero como buenos yunclereños, no íbamos a dejar el listón tan bajo, y nos fuimos a hacer el recorrido del encierro (Calle Estafeta, plaza de toros...)y tomamos algo por el centro. Visitamos también Café Iruña, sitio emblemático por ser muy visitado por el escritor Ernest Hemingway, gran aficionado a los sanfermines y enamorado de la ciudad.

Ya el sábado, visitamos la exposición Occidens que está en la Catedral de Pamplona. Merece mucho la pena, ya que explica de manera muy visual el impacto del cristianismo en Occidente y la evolución de nuestra cultura hasta hoy.

Nos llamó mucho la atención cómo hemos pasado de ser una cultura tan rica en valores a otra tan "aguada" y con riesgo de perderse si no ponemos los medios para cambiarlo.

Después vimos cómo no, la iglesia de San Lorenzo, donde está San Fermín, y asistimos a la Santa Misa en la Clínica Universidad de Navarra, donde D. Salus pudo concelebrar.

Tras comer en el Campus de la Universidad, visitamos el Castillo de Javier, donde vivió San Francisco Javier, cuna de las misiones y sitio navarro por excelencia. Allí Teresa nos contó algunas anécdotas muy bonitas de la vida del Santo.

Después visitamos el Monasterio de Leyre. Una joya por el edificio que es y por la paz que se respira allí. Tuvimos además la oportunidad de escuchar las vísperas cantadas por los monjes que allí viven.

Por la noche cenamos en Puente la Reina, un pueblo con mucha historia y sitio de peregrinos, ya que es cruce de los caminos franceses del Camino de Santiago.

Ya el domingo visitamos San Sebastián y tuvimos la oportunidad de tener un encuentro con M. Munilla, el Obispo de la ciudad, que muy amablemente nos acogió, charlamos un rato con él y nos contó del grato recuerdo que tiene de sus años de seminarista en Toledo. Nos dio las gracias por la visita y le hicimos entrega del escapulario de la Virgen del Carmen de Yuncler, que agradeció enormemente. Fue un regalo conocerle.

Después, asistimos a Misa en la Catedral y comimos de pintxos por allí cerca de la playa de la Concha.

Por la tarde, ya de recogida, visitamos como último monumento Olite, un pueblo de la rivera navarra que es muy famoso por un palacio del siglo XIV que fue la envidia de todas las cortes europeas. Disfrutamos como niños subiéndonos por las torres y por las almenas.

A pesar de que ha sido poco tiempo, nos cundió mucho, pero lo más importante no es lo que hemos hecho ni lo que hemos visitado, porque los viajes y los lugares los hacen las personas.

Habrá entonces que pensar ya en la siguiente... Y con más gente!

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Fotos Convivencia a Navarra Y País Vasco