San Ignacio de Loyola
Hoy la Iglesia celebra a San Ignacio de Loyola, fundador de los Jesuítas.
Nació en Azpeitia en 1497 en el seno de una familia noble y murió en Roma el 31 de julio de 1556.
Fue un valiente soldado, que llegó a tener altos cargos como militar. A los 30 años, en la defensa de Pamplona resulta herido en la pierna, y a pesar de los intentos de los médicos, no lograron salvarle de una cojera que tendría el resto de su vida.
Durante su convalecencia en su Castillo de Loyola, para llenar su tiempo y entretenerse, pidió libros de caballerías, pero su hermana le dijo que solo tenía libros de santos, que comenzó a leer con mucho interés, porque decía que los libros de caballerías hasta el momento le habían supuesto alegrías pasajeras que luego le dejaban con tristeza por lo irreales que son, pero las vidas de los santos y de Cristo le dejaban un poso de tremenda alegría.
Leer la vida de tantas personas que siendo gente normal le dieron su vida a Cristo, le cambió la vida, y se llegó a plantear, "Si ellos pudieron, ¿Porqué yo no?".
Mientras pensaba si convertirse, una noche se le apareció la Virgen con su Hijo y le dejó muchísima paz. Desde entonces, decidió no servir más a gobernantes de la tierra, sino al Rey del Cielo.
Cuando acabó su convalecencia se fue en peregrinación a la Virgen de Montserrat vestido de saco para hacer penitencia por todos los pecados de su vida.
Tras varios periplos, se va a París a estudiar en la Sorbona, donde conoce a seis compañeros con los que funda la Compañía de Jesús. Los siete hicieron voto de castidad, pobreza y obediencia, poniéndose a disposición del Papa en lo que quisiera para más gloria de Dios.
Pasó el resto de su vida en Roma sacando adelante la labor que el Señor le había encomendado al frente de la Compañía, y se fundaron muchos colegios y universidades con el fin de dar a conocer al Señor en todas partes.
Su libro más célebre es "Ejercicios Espirituales", que tanto han ayudado a lo largo de todos estos siglos a mucha gente a encontrarse con Dios.
Hoy es una gran fiesta.
Nació en Azpeitia en 1497 en el seno de una familia noble y murió en Roma el 31 de julio de 1556.
Fue un valiente soldado, que llegó a tener altos cargos como militar. A los 30 años, en la defensa de Pamplona resulta herido en la pierna, y a pesar de los intentos de los médicos, no lograron salvarle de una cojera que tendría el resto de su vida.Durante su convalecencia en su Castillo de Loyola, para llenar su tiempo y entretenerse, pidió libros de caballerías, pero su hermana le dijo que solo tenía libros de santos, que comenzó a leer con mucho interés, porque decía que los libros de caballerías hasta el momento le habían supuesto alegrías pasajeras que luego le dejaban con tristeza por lo irreales que son, pero las vidas de los santos y de Cristo le dejaban un poso de tremenda alegría.
Leer la vida de tantas personas que siendo gente normal le dieron su vida a Cristo, le cambió la vida, y se llegó a plantear, "Si ellos pudieron, ¿Porqué yo no?".
Mientras pensaba si convertirse, una noche se le apareció la Virgen con su Hijo y le dejó muchísima paz. Desde entonces, decidió no servir más a gobernantes de la tierra, sino al Rey del Cielo.
Cuando acabó su convalecencia se fue en peregrinación a la Virgen de Montserrat vestido de saco para hacer penitencia por todos los pecados de su vida.
Tras varios periplos, se va a París a estudiar en la Sorbona, donde conoce a seis compañeros con los que funda la Compañía de Jesús. Los siete hicieron voto de castidad, pobreza y obediencia, poniéndose a disposición del Papa en lo que quisiera para más gloria de Dios.
Pasó el resto de su vida en Roma sacando adelante la labor que el Señor le había encomendado al frente de la Compañía, y se fundaron muchos colegios y universidades con el fin de dar a conocer al Señor en todas partes.Su libro más célebre es "Ejercicios Espirituales", que tanto han ayudado a lo largo de todos estos siglos a mucha gente a encontrarse con Dios.
Hoy es una gran fiesta.
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